Unas risas.

Viernes noche.  Cena en restaurante de un emprendedor que además  de emprender  involucra a sus ocho hermanos. Un ejemplo de simpatía y dinamismo.

Viernes noche.  Llegamos con el peso de la semana. Nudos, tensiones, proyectos, novedades, responsabilidades...de mayores, aunque seamos niños en muchas de nuestras reacciones.

Viernes noche.  Vamos cenando,  nos vamos relajando, será el vino, la buena mesa, la compañía de los que te quieren desde dentro y desde siempre.

Viernes noche entramos en la fase anecdotaria, son ya mucho años y Pilar sigue sin hablar inglés, y los hombres siguen siendo hombres y lloramos, lloramos de risa.

Viernes noche. Copas y mojitos y más risas. Imaginamos tonterías. Resolvemos el mundo.  Los ángeles de Charlie en la ONU. Creamos la nueva dirección general para de prevención de riesgos nucleares y  asuntos alimentarios en las smart cities  que dirigimos, recién pasadas por el quirófano para rebajar cartucheras, engordar moritos resultar física y políticamente correctas. 

Viernes noche. La sonrisa puesta. Disfrute y regocijo. Calor del alma el del buen amigo.

LORA PRO NOBIS

No es una errata la 'L'. Es la contestación de Rafa cuando decimos Mater Salvatoris...añade una 'l' al tradicional 'ora' y sale  nuestro apellido. LORA.
Y eso era la tarde de hoy. Los Lora del Cielo y los Lora de la Tierra en comunión en misa de 7. Oficiando nuestro cura. Cantando nuestras monjas. Patrimonializando un poco de cielo en la tierra. Aunque a veces, lo digo por mi, llenemos de agua a los que no tienen  sed. Aunque a veces, lo digo por mi, nos creamos más convertiditos que los demás. Aunque  veces, lo digo por mi, debamos agachar la cerviz.
Pero con todo y con eso es siempre precioso tener al cantante rumboso al que mi Rafa miraba cómo si tuviera al lado al mismo Bruce, a la monja piadosa tocando el órgano y la sobrina aplicada mirandole a la cara, al notario bondadoso a su mujer estilosa  entregada y sigilosa. El economista inteligente y su mujer prudente. Mis primos glamourosos gran hijo uno, padrazo el otro, y mi adoraba Maestra de bailes y bellas artes que parió esa criatura entregada a Dios y a las alturas. Y 18J sabio. Y los primos más andaluces que ven en mi Almu algunas luces de nuestra abuela  común y ese ojo brillante y azul. Y Pepa madrina siempre divina. Porque es de Dios.
Silencio en la celebración y mucho eco infantilón. Gracias por tu semilla querido abuelo Manuel.
Silencio y algarabía, misericordia y alegría, ruido, hambre, sed y don, necesitamos de tu perdón. Concluye la celebración. Me inclino a ti Niño de Dios. Te beso con devoción. Echo el resto de mi mogollón.
Toma a esta familia. Su fe, su chispa de ti, su ilusión . Toma nuestro pecado y haznos para servirte mejor.
LORA pro nobis Mater. Lora pro nobis, hoy.

El mejor regalo

El mejor regalo de Reyes han sido las pistolas con balas de gomaespuma que le han traído a mi hijo Rafa.
Sí es un juguete bélico. Sí puede hacer daño si te da en un ojo. Sí genera un estado de batalla campal en casa, de guerra de guerrillas. Sí  crea bandos y acoso asfixiante entre ellos. Sí precisa de tratados de paz y negociaciaciones muy duras, a cara de perro. Sí me recuerda a cuando jugaba con mis primos pero en vez de balas teníamos sonidos guturales ratatatatá. 
Pero ...es lo bueno. Ahora mismo en el pasillo hay cinco hijos de edades entre los 15 y los 4 años. Dos niñas y tres niños repartidos en dos equipos, perdón ejércitos, escondidos estratégicamente, disparando, riendo a acarcajas, peleando, juntos, a la vez, los cinco haciendo algo a la vez...aunque sea la guerra.
Gracias Reyes Magos por traernos las pistolas y las balas de gomaespuma pero sobre todo a ese quinto hijo que las pidió y que nos hace seguir siendo niños a todos.

Un año más.

Un año más ha Nacido el Niño de Dios. Un año más lo hemos recibido. Mejor o peor con  más o menos emoción,  con ganas o con precaución.
Un año más se ha hecho presente a veces velada, otras bien evidente. 
Un año más hemos  vivido la alegría, la ilusión del regalo, del alboroto del recibir y de la fiesta del don.
Y un año más doy gracias por todo y a todos  a mi hijos por convivir a  mi marido por ser,  a madre por velar y dar, a cuñados y cuñadas  por compartir, a suegro por !escribir!  A  suegra por cocinar y sufrir ,  a los amigos  por reir.
Un año más disfruto por todo lo compartido excursiones, museos, meriendas, meriendas,  la pularda que no es pollo, la tapilla y las habas y la crema catalana y el roscón industrial, !que sabe genial!

Un año más en que todo parece igual, y en  que  en ese todo ser 'normal' reside lo más esencial.