lunes, 22 de enero de 2018

De una alumna agradecida...

Hoy la Tesela me la escribe una alumna agradecida...estas cosas dan sentido a una vocación-profesión.
¡Gracias por  el legado abuelo¡



Estimada Profesora Marta.

Antes de nada, me presento, soy  alumna de la asignatura de Administrativo IV, y espectadora del curso que usted impartió los días 13 y 14 de este mes.

La finalidad de este mensaje, tras haber realizado el examen hace un ratito, es darle las GRACIAS, en mayúsculas y bien grandes, por su ponencia en el curso. Me ha parecido usted una profesora excepcional y una oradora de lujo.
Para el momento del curso ya tenía dadas un par de vueltas al temario, y la asignatura bastante bien asimilada y aprendida, pero fue tras el curso cuando todo empezó a tener sentido gracias a sus explicaciones. Con lo que usted nos fue explicando, desmenuzando y con la manera en que nos fue guiando a través sea materia, toda la información y los conocimientos que yo ya tenía, de pronto iban tomando forma. Todo tenía más sentido, estaba más relacionado, era más lógico. ¡Y qué decir de la parte de urbanismo! Su explicación ha sido fundamental para dar sentido a muchas partes y para entender muchas otras, de manera que no sólo he memorizar datos y leyes con sus novedades, sino que siento que gracias a usted he aprendido de verdad la materia, la he entendido  y en esta última semana de repaso, la he disfrutado muchísimo, ¡qué bonita es cuando se la entiende bien!

Y todo esto ha desembocado en un examen que he podido defender muy bien, ya no sólo por saber la materia y poder plasmarla, sino porque he visto las preguntas, he sabido ubicarlas y contextualizarlas, he entendido qué se me preguntaba y he podido hacerle frente, y eso, para mí es un logro, al margen de la nota numérica que luego aparezca.

Le reitero mi agradecimiento por su tiempo en ese curso, y la felicito de corazón por la gran docente que me ha parecido usted. No sólo se nota que sabe usted sabe, sino que sabe transmitir y enseñar su sabiduría.

Le deseo lo mejor en su carrera, y en la vida en general.
Reciba un cariñoso saludo

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viernes, 5 de enero de 2018

Lo volvería a pasar.

Noche de fiesta. Cena de padres de un equipo de fútbol. Todos guapos y elegantes. Con ganas de reír y pasar un buen rato.

Noche de fiesta. En vez del mago de chiste grotesco y truco fácilón tenemos grupo de música. Bailes y risas sin parar. Los cuarenta-cincuentones nos venimos arriba.

Noche de fiesta. Reencuentro con una madre. Hace un año que no nos vemos. Lleva el pelo corto, muy corto. Está radiante. Sonríe grande.

Noche de fiesta. Entre copa y copa. Baile y baile. Hablamos: De los hijos que se van haciendo. De nuestro 'Máter' del alma que in-forma a nuestras hijas desde dentro hacia fuera. Y las conducen sigilosa pero constante y discretamente a amar la verdad, la belleza, el  bien.

Noche de fiesta. Va el 'sarandonga' pitos y palmas.  Ole sandunga.

Noche de fiesta seguimos la conversación y esa madre, gran mujer me da las gracias por haber pedido por ella. Ha sido duro, muy duro pero...

Lo volvería  a pasar.

Llevo todas las Navidades con ese estribillo en mi alma resonando fuerte. Admirando y dando gracias por esas personas que asumen el dolor y lo hacen propio y lo transforman en amor, amor del bueno ese que nace de la sonrisa, de la risa y del llanto y del miedo y del dolor profundo.

Lo volvería  a pasar...
 
Gracias Señor por mostrarnos que  el dolor engrandece, nos acerca a ti, nos hace más tuyos.

Lo volvería a pasar...

Gracias Cristina por vivir así.